5 señales que pueden identificar a un niño con autismo

1. El autismo provoca que no conecte con los demás

Las personas tienden a conectar entre sí, pero los niños con autismo se muestran distantes, incluso con sus seres más queridos. Tanta es la desconexión que su actitud ante un rostro enfadado u otro sonriente es exactamente la misma.

2. Sus reacciones emocionales son desproporcionadas

Todos los niños sufren peleas lloran o gritan en contextos que consideramos normales. Por ejemplo, si estamos en el supermercado y no le compramos ese dulce que tanto quieren, es probable que estallen e intenten llamar nuestra atención para que cambiemos de idea.

Los niños con autismo actúan de forma completamente diferente. En una situación normal tienen reacciones emocionales que no se corresponden con el contexto. No hay un aliciente para su reacción, nada la ha provocado, al menos no aparentemente.

3. Sufre un retraso en el desarrollo del lenguaje

Normalmente, alrededor de los dos años los niños empiezan a combinar palabras como “nena silla”, “gato malo” intentando imitar el lenguaje de los adultos. Pero, los niños con autismo no empiezan a hacer esto por sí mismos hasta muy tarde.

Esta es una de las señales más significativas, pues mientras los niños de su alrededor empiezan a decir sus primeras palabras, a manifestarse verbalmente, a preparar su tracto vocal para la comunicación mediante balbuceos, el niño con autismo se mantiene ausente y en silencio.

 

4. Mantiene conductas repetitivas e hipersensibilidad

Los niños con autismo presentan la tendencia a mostrar comportamientos repetitivos. Por ejemplo, repetir la misma palabra una y otra vez, o poner en su sitio un objeto una y otra vez. También, pueden abrir y cerrar un cajón sin cansarse repetidas veces.

Pero, la conducta repetitiva no es la señal más llamativa de que nuestro hijo pueda tener autismo, sino también su aparente hipersensibilidad. Los niños con autismo ante el ruido, la luz, los olores, los colores y cualquier otro estímulo, pueden verse agitados.

5. No desarrolla la comunicación no verbal

La comunicación no verbal es muy importante, presenta el 93% de lo que comunicamos. Aquí entran en juego tanto nuestros movimientos, como los gestos, el tono de voz, la entonación, etcétera. Tan solo el 7% de nuestra comunicación es verbal.

Los niños con autismo, debido a sus problemas para relacionarse y comunicarse, no logran desarrollar la comunicación no verbal, por eso no la identifican tampoco en los demás. Anteriormente, hemos hablado de cómo un niño con autismo responde de igual manera ante un rostro sonriente que otro enfadado. Su comportamiento señala indiferencia ante el estímulo no verbal.